jueves, 11 de abril de 2013

Encarnizamiento terapéutico vs limitación del esfuerzo terapéutico

Mi entrada de hoy va dirigida a un tema que considero de gran importancia: el encarnizamiento terapéutico vs limitación del esfuerzo terapéutico.  Para ir entrando un poco en materia, voy a dejar un vídeo llamado "la dama y la muerte" que refleja bastante bien el tema del que voy a tratar: http://www.youtube.com/watch?v=8Zrw61WiBiQ


El 20% de los pacientes ingresados en una unidad de cuidados críticos fallece. Dependiendo de la patología y de la evolución de un enfermo, pueden alargarse mucho los últimos días de vida mediante terapias utilizadas, aún cuando se sabe que no existe posibilidad de recuperación. Este ha sido un tema muy comentado y existen multitud de opiniones que van a variar dependiendo de si hablamos de un familiar o de una persona desconocida.

Como enfermeras es importante tener en cuenta este último punto, para entender las decisiones y comportamientos de los familiares y saber como llevar el tema una vez llegado el momento. Debemos de mantenernos en una posición lo mas objetiva posible, buscando siempre el bienestar del paciente sin olvidarnos de su familia.

He sido testigo en varias ocasiones durante este rotatorio en la UCI de este tipo de situaciones, que resultan cuanto menos muy complicadas. Además a mi parecer la línea que diferencia en muchas ocasiones a un paciente candidato de cuidados críticos y a un paciente candidato de cuidados paliativos puede ser muy fina. 

He tenido la oportunidad en otras rotaciones de pasar por una unidad de cuidados paliativos, cuyo fin es mejorar la calidad de vida del enfermo antes de su muerte. En esa unidad me cambió el "chip", y me di cuenta de que los cuidados paliativos son una parte muy importante y "bonita" de la enfermería, aunque pueda sonar raro eso de bonita...pero al igual que en el vídeo, llega un momento en el cual el enfermo solo quiere descansar y estar tranquilo durante el tiempo que le quede, sin que se le realice ningún procedimiento de mantenimiento de la vida que le genere disconfort y estrés.

La gran cantidad de técnicas y de tecnología hoy existente, puede cegarnos de cosas más importantes una vez llegados al extremo de los pacientes sin posibilidad de curación, por lo que una amplia formación y experiencia son fundamentales para detectar estas situaciones lo antes posible e impedir el encarnizamiento terapéutico con el consecuente sufrimiento que se produce en el enfermo.



La limitación del esfuerzo terapéutico no es algo que se decida de la noche a la mañana ya que consiste en retirar los tratamientos que no proporcionan beneficios al paciente y se procede a ello una vez que se ha visto la evolución del enfermo y hacia donde van encaminados los deseos de los pacientes y las familias.

Es importante no caer en el extremo de "dejadez"en el que se retiren cuidados y tratamientos de los que sí puede beneficiarse el enfermo (le proporcionan confort) por el hecho de que se encuentre en una situación irreversible. Por estos pacientes se siguen pudiendo hacer cantidad de acciones para que pasen sus últimos días de la forma más digna, de modo que no implique que se deje sin ningún tipo de atención a estas personas.

Algunos pacientes que ingresan en estas condiciones disponen de las últimas voluntades, entre las que se suele incluir sus deseos respecto a la reanimación o el uso de medidas agresivas para el mantenimiento de su vida. Desgraciadamente no todos los pacientes cuentan con este documento, encontrándonos los sanitarios en una situación controvertida cuando el paciente es incapaz de tomar o comunicar su opinión respecto a este tema. En este caso suelen ser los familiares quienes se encargan de tomar las decisiones. Para ello se debe poner en disposición de la familia toda la información oportuna, para que puedan decidir del modo más objetivo posible. Aun así el personal sanitario deberá decidir cuando realizar un tratamiento, guiándonos según los principios de beneficencia y de no maleficencia  planteándonos si con los tratamientos conseguimos algún tipo de beneficio y si es mayor que los inconvenientes.

En mi opinión, la sociedad en general ve la muerte como algo malo a evitar a toda costa y como un fracaso terapéutico. La muerte debería verse como la última fase a la que todos llegaremos un día y que ni la medicina puede evitar. Llegados a este punto, en el que la vida toma su fin, solo nos puede quedar tratar de morir con la mayor dignidad y calidad posible, algo que con tantos avances médicos y tecnológicos, se nos puede pasar de largo.

Bibliografía:

-Sánchez Miranda J.M, Antonio Gutiérrez C. Aspectos éticos acerca de los cuidados en etapas terminales de la vida en unidades de cuidados intensivos. Revista Cubana de Medicina Intensiva y Emergencias. 2004; 3 (1) 97-110.
 Palomeque Rico A. Cuidados intensivos y cuidados paliativos. 2005; 62(5):409-11

d´Empaire G, de d´Empaire M.E, Encinoso J. Limitación de medidas terapéuticas en los pacientes críticos. Gac Méd Caracas. 2002;  110(1): 92-109.

1 comentario:

  1. Muy buen video, ya lo conocia. Producido por Antonio Banderas y con la supervisión de la Enfermeria de Málag. Pues efectivamente, a veces esa linea es tan fina, la que separa los cuidados paliativos y criticos, que es dificil de distinguir. Todavia muchos entienden la muerte como un fracaso de la medicina y no saben cuan confundidos están.
    Bonita reflexión Violeta

    ResponderEliminar